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  1. Hola. Pues tiene que ser una ilusión optica. Pienso que igual llegaron a su distancia máxima y daba la impresión. Me comentaron que algunos DD usaban cargas de profundidad para despistar a los barcos que les apuntaban. Gracias a todos.
  2. Hoy en una batalla he visto como un DD destruía torpedos con cargas de profundidad. Esto es posible y desde cuando. Gracias.
  3. AISTER HS60 PATRULLERIA RIO IRO. Aislamientos Térmicos de Galicia (Aister), la empresa naval de Moaña, ha entregado una nueva lancha a la Guardia Civil. La embarcación, de nombre Río Iro, está especialmente diseñada para el combate del narcotráfico y el crimen en las costas de España. Para ello, puede alcanzar velocidades de 60 nudos (unos 111 kilómetros por hora), comparables a las de las narcolanchas más rápidas. Esta entrega se suma a un plan de renovación de la flota puesto en marcha hace tres años. En aquel momento la Guardia Civil adquirió las lanchas H60, anunciada en su momento como «la patrullera más rápida del mundo», con velocidades de entre 60 y 70 nudos (entre 111 y 130 kilómetros por hora), y Río Flumen. En el 2021, la Guardia Civil también encargó una patrullera a Armón Vigo y, en octubre del 2022, recibió la segunda de dos unidades de la Rodman 66.
  4. AISTER HS60. PATRULLERA RIO FLUMER. La HS60 Río Flumen es la última incorporación a la flota del Servicio Marítimo de la Guardia Civil (SEMAR). Diseñada y construida en aluminio por el astillero pontevedrés Aister para operar en la zona del estrecho de Gibraltar contra el narcotráfico, el crimen organizado y la inmigración irregular, la Río Flumen es una de las lanchas interceptoras más rápidas en el mundo hoy en día gracias a los 60 nudos de velocidad máxima que es capaz de alcanzar y la más rápida con propulsores a chorro de agua. Mediante el uso de aluminio, Aister ha conseguido reducir el peso de la embarcación a la mitad comparado con el resultado de haberla construido en acero naval. No solo eso, sino que la embarcación es también más resistente que si hubiera sido construida en poliéster reforzado de fibra de vidrio (PRFV) como sus predecesoras. En total, sumando su propio peso al de los consumibles (aceites, combustibles y agua) la Río Flumen pesa tan solo 28 toneladas. Gracias a su ligereza y los dos motores de 1.325 kW cada uno que alimentan los dos propulsores a chorro de agua que la impulsan, la interceptora es capaz de navegar a una velocidad sostenida de 55 nudos y máxima de 60. Diseñada desde cero por el astillero pontevedrés, la Río Flumen tiene unas dimensiones de 18,5 metros de eslora por 4,5 metros de manga. En su interior cuenta con espacio para cuatro tripulantes, que pueden gobernarla desde un puesto interior o uno exterior con visión de 360º, sentados cómodamente en asientos ergonómicos con amortiguación antishock. Para navegaciones de larga duración la embarcación está equipada con camarote, cocina y baño. Dispone también de un radar de navegación, sistema de comunicación por satélite, proyector de luz con un alcance de 1.200 metros y un lanzagranadas automático de 40 mm. El diseño de su casco, en V profunda, le permite navegar a altas velocidades sin reducir la maniobrabilidad y agilidad necesaria en las persecuciones, siendo capaz de girar 360º en muy poco espacio y de detenerse de velocidad punta a cero en tan solo 36 metros. La patrullera está configurada para hasta doce horas de patrullaje a una distancia máxima de la costa de 20 millas. Con una vida útil de 15 años, la Río Flumen se encuentra ya patrullando en la zona del estrecho de Gibraltar desde su base en Algeciras como parte del Plan Integral de Seguridad del Campo de Gibraltar, en tareas de lucha contra el narcotráfico, el crimen organizado y la inmigración irregular. Es la primera de dos embarcaciones adjudicadas en octubre de 2021 a Aister con un presupuesto total de 4,5 millones de euros. La segunda unidad se incorporará este verano a la provincia de Huelva. Además, el astillero de Moaña se ha adjudicado un segundo concurso para la construcción de otras tres embarcaciones para la Guardia Civil, ofreciendo una versión optimizada de la HS60, por un valor de 7,2 millones de euros.
  5. Ahora ya se por que me toca el LEIPZING. lo regalan a mitad del astillero próximo. Que CA....N es Wargaming.
  6. Yo me quedo en 11 aciertos, y contento por el triunfo. Todos los equipos muy justos con lo que cualquier resultado podía ser. El LEIPZING crucero aleman tier VI.
  7. Nido de ametralladora de la Línea P construido en los Pirineos catalanes. La línea P, oficialmente Organización defensiva del Pirineo, fue una barrera defensiva construida entre 1944 y 1948 para evitar que, dependiendo de las épocas, los maquis o los Aliados penetraran en el territorio español. Se componía teóricamente de unos 10 000 búnkeres, de los que unos 6000 fueron terminados. Hacia 1980 se abandonaron definitivamente. En sentido más amplio recibe esta denominación la fortificación pirenaica realizada tras la Guerra Civil, que incluiría las fortificaciones previas (1939-1940), la defensa contracarro (1950-1954) y otras fortificaciones puntuales (como la del cabo de Higuer en Fuenterrabía, Guipúzcoa de 1957). Antecedentes[editar] Mapa geográfico de los Pirineos. Ya desde el s. x la cadena montañosa de los Pirineos fue considerada una gran frontera natural. A lo largo de toda ella se construyeron edificios fortificados tales como torres de vigilancia, castillos, iglesias y mansiones, puesto que en muchos puntos era el paso de comunicación con el resto de Europa. Tras finalizar la guerra civil española, el gobierno del general Franco decide construir una gran barrera defensiva en esta cadena montañosa, en algunos casos muy similar a las existentes en el resto del continente. Dicha barrera iría desde el Mediterráneo hasta el Cantábrico, aproximadamente 500 km de asentamientos fortificados. Significado del nombre[editar] La denominación "Línea P" no tiene carácter oficial. La letra “P” es la abreviatura de Pirineos; de esta forma sería Línea Pirineos. No obstante existen otras dos denominaciones, una es la “Línea Pérez” y la otra conocida en Cataluña como la “Línea Gutiérrez”; el por qué nadie lo sabe, es posible que fuese llamada así por el coronel de Ingenieros Manuel Duelo Gutiérrez, el cual participó en una reunión relativa a esta línea fortificada. Muchos misterios existen alrededor de esta obra, puesto que fue totalmente un secreto militar del que ahora empezamos a desvelar y entender su realización. Los miles de asentamientos que salpican las montañas y valles del Pirineo se llevaron a cabo entre 1944 y 1957. Esta magna obra de fortificación no entró en ningún momento en servicio y realmente tampoco se llegó a concluir. Hoy en día se ha quedado totalmente obsoleta y pertenece ya a la historia reciente. Situación política en el momento de la construcción[editar] Tras finalizar la contienda española muchos españoles se asentaron en las montañas de los Pirineos y se formó un gobierno en el exilio situado en la ciudad francesa de Toulouse. Muchas de estas personas esperaban y confiaban en que el gobierno francés de De Gaulle y sus aliados pudieran atacar a Franco y reconquistar España. El 19 de agosto de 1944 se produce la esperada liberación, ello da a la frontera española una especial relevancia. Ni el general Franco ni los alemanes pudieron conseguir nunca el cerrar la frontera de una forma eficaz, puesto que se buscaban rutas alternativas a las habituales para cruzarla. En octubre de 1944, miembros exiliados del PCE en el sur de Francia inician la denominada Operación Reconquista de España en la que milicianos españoles penetran en territorio español procedentes de Francia para intentar que con su acción los españoles contrarios al régimen se sublevaran iniciando lo que sería un proceso que acabaría con la dictadura del general Franco. Esta operación terminó en un completo fracaso para el bando republicano pero forzó a los dirigentes de la dictadura española a prepararse para futuros ataques similares. En 1945 De Gaulle hace retirar todas las banderas republicanas españolas en Francia y se desentiende definitivamente de la Junta Española de Liberación (J.E.C.) a la que no reconocerá. Estos españoles, tras el rechazo francés y de sus aliados, se verán obligados a una guerra de guerrillas, conocida como el maquis. El 18 de abril de 1946, Polonia, apoyada por la Unión Soviética, Francia y México, pide en la ONU la condena a España como país agresivo por la construcción de fortificaciones en el pirineo catalán, pero nadie sabía que estas obras ya habían comenzado hacia dos años en toda la cordillera. Esta petición fue rechazada gracias al británico sir Alexander Cadogan, representante de Inglaterra en la ONU. Finalmente el gobierno de Estados Unidos comunicó los resultados de una encuesta “que las fortificaciones en los Pirineos eran esencialmente defensivas”. Construcción[editar] Puesto de ametralladora en el C.R. 76 de La Guingueta. Se trataba de conseguir que la frontera resultase impermeable. El ejército en aquella época pensaba que con estas obras de fortificación se podría parar un ejército que entrase por alguno de los pasos de montaña hacia España. No obstante, los franceses, con su experiencia con la Línea Maginot, la consideraban una obra ligera. Entre junio de 1939 y junio de 1940 se construyó un notable conjunto de fortificaciones, que en el caso de los Pirineos occidentales (Guipúzcoa y Navarra) recibieron la denominación de "Fortificación Vallespín", ya que fue este coronel, destinado en San Sebastián, quien las diseñó. Paralizada su construcción en 1940, se siguieron construyendo las carreteras a ella vinculadas, a la espera de que en 1944 comenzara la construcción de la "Línea P", en la que se integraron parcialmente las fortificaciones. Típico nido de ametralladoras en la zona navarra de la línea, cerca de Burguete. El comienzo fue en el otoño de 1944, pero los planos y demás documentación ya estaban listos en 1943. Para su construcción se movilizaron grandes cantidades de medios y hombres (esencialmente soldados de reemplazo). La obra fue confiada a las antiguas regiones militares que hacían frontera con el país vecino; la IV, V y VI. La línea estaba dividida en Sectores, y éstos a su vez en Centros de Resistencia o C.R. (también se llaman Núcleo de Resistencia o N.R.), que englobaban gran cantidad de asentamientos. En Cataluña nada menos que 100 Núcleos de Resistencia y en Navarra/País Vasco, 56. En el caso de Aragón existen 20 Centros de Resistencia, numerados del 101 al 120 y cubriendo todo el Pirineo aragonés (desde el valle de Zuriza hasta el límite con la provincia de Lérida). Es la región que posee menos densidad de Núcleos, debido probablemente a que en muchas partes las montañas superan los 2500 m s. n. m., lo que de por sí las hacen inaccesibles. Para realizar estos trabajos se elegía un centro de operaciones dentro de cada zona que fortificar. En el caso del Valle del río Aragón se eligió la estación de ferrocarril de Canfranc, por encontrarse en un punto central. En este lugar se realizaban los trabajos de carpintería y almacenamiento del material de construcción, a la vez que servía de alojamiento a los soldados que trabajaban. Desde este punto se llevaba todo hasta los lugares a construir, en muchos casos parte del transporte se realizaba en mulos, llegando a tardar hasta seis horas en llegar a destino, como por ejemplo al N.R. 114 La Raca. El plan originario era que cada lugar construido se rodease de unas trincheras comunicadas entre sí y situar en cada extremo un pozo de tirador; todo el conjunto estaría rodeado por una alambrada. Ni los pozos ni las alambradas se llegaron a construir, y no pasaron de ser un proyecto en los planos de cada asentamiento. Cabe decir que las alambradas y las puertas blindadas que cerraban estos asentamientos permanecieron almacenadas en Figueras, Pamplona y Jaca. Aún sin haber sido terminada esta gran obra se sucedieron a lo largo de años varias inspecciones militares para comprobar el estado en que se encontraban los asentamientos ya que el mando militar consideraba estas obras como estratégicas en la defensa militar del territorio nacional. Las últimas comprobaciones de estas fortificaciones en el valle del río Aragón datan de finales de los años ochenta. Composición de los centros de resistencia[editar] Cada Núcleo de Resistencia poseía gran cantidad de asentamientos agrupados en Puntos de Apoyo, y éstos a su vez en Elementos y ellos en Subelementos. Los asentamientos construidos alojarían las siguientes armas: Fusil ametrallador. Ametralladora. Cañón antitanque. Cañón de Infantería. Ametralladora antiaérea. Mortero de 81 mm. Mortero de 50 mm. También se construyeron observatorios, abrigos de sección y depósitos de municiones o víveres. Ejemplo de Centro de Resistencia Línea P[editar] Un centro típico es el denominado N.R. 113 El Castellar. Se sitúa en la propia estación invernal de Candanchú, en el nacimiento del río Aragón. De todos los N.R. del valle del río Aragón el 113 es el que más asentamientos o nidos (así se les denomina en muchos casos) posee; esto se debe a que se encuentra justo en la misma frontera. Posee un total de 62 asentamientos y algunos más (hasta 89), tendría si se hubiera llegado a completar. El 1 de marzo de 1951 este Centro de Resistencia comprendía: la Rinconada de Candanchú, las laderas norte y este del Tobazo y finalmente la región del río Aragón y carretera general entre el puente de Santa Cristina y la Raqueta. Podemos reconocer cinco tipos diferentes de asentamientos: Asentamientos de observación o de mando Situados en las cotas más elevadas, ya que desde ellas se tiene una panorámica sobre todo el conjunto o de buena parte de él. Asentamientos de combate Nido de ametralladora de la Línea P en Echalar. Son los más numerosos. En ellos podrían alojar fusiles ametralladores o ametralladoras. Prácticamente la mayoría están casi enterrados y cubiertos de hierba o rocas del lugar, creando con ello un perfecto camuflaje. Cubrían por sus mirillas (algunos poseían hasta dos) un sector de tiro fijo. El espacio interior es de aproximadamente 4 m². En los proyectos, cada asentamiento tenía a su alrededor varios pozos de tirador unidos mediante túneles o trincheras. Asentamientos de artillería Los más grandes, ya que tenían que alojar un cañón antitanque o uno de infantería. Situados en puntos muy estratégicos para batir especialmente las carreteras. Asentamientos a cielo abierto Estos comprendían las ametralladoras antiaéreas o a los morteros de 81 y 50 mm. Generalmente se encuentran en las partes más elevadas, para de esta forma tener más cobertura de fuego. Abrigos Excavados en la propia roca de los escarpados de cada N.R., servirían para dar cobijo a la tropa destinada o a almacenamiento de municiones y víveres. La distribución de todo el conjunto está muy estudiada, pues están distribuidos de una forma escalonada desde las cumbres del Núcleo hasta la propia carretera. Zonas de asentamiento[editar] Podemos agrupar estos asentamientos en varias zonas: Una sería los que se encuentran a pie de la propia carretera. Va desde el puente del Ruso hasta el puente de Santa Cristina. La siguiente podría ser la que se encuentra en el barranco de Candanchú, es decir, desde la carretera hacia la Zapatilla. Una tercera zona estaría en el monte de El Castellar y al lado de ella otra en La Raqueta. Otra zona podría estar determinada por la ladera de La Raca que desciende hasta el río Aragón. Finalmente habría que agrupar en otra zona a los asentamientos de La Canal Roya. Muchos de estos elementos no se llegaron a terminar nunca. Según se puede comprobar in situ, gran cantidad de ellos conservan todavía las maderas del encofrado colocadas en su lugar, lo que confirma que la construcción de la Línea P se abandonó antes de terminarla. Muchos de estos asentamientos se han perdido o han sido mutilados con la ampliación que se le hizo en esta parte a la carretera general 330. Estas obras no solo afectaron a los asentamientos; la antigua casa del Ruso ya no existe. El estado de conservación no es del todo malo, muchos de ellos interiormente están muy accesibles y limpios, otros en cambio están enronados de tierra o piedras. En algunos casos los asentamientos han perdido su enmascaramiento, pudiéndose observar el hormigón con el que están construidos. Finalmente cabría decir que el proyecto no sólo contemplaba la construcción de asentamientos, sino que incluía un informe de destrucciones. Este informe daba cuenta de todas las destrucciones que se tendrían que realizar en caso de una penetración enemiga hacia el valle, para no entorpecer los fuegos y que el enemigo no tuviese parapeto alguno. Además de estos informes, también estaba el de minas. Muchos de estos asentamientos aparte de contar con alambradas tendrían que estar protegidos en su alrededor con un campo de minas, en algunos casos contra carros y en otros contra personal. En este aspecto hay que dar gracias a que nunca entrase en servicio esta obra, ya que las consecuencias posteriores en esta zona tan turística hubiesen sido nefastas. Recuperación[editar] Entrada de una casamata ubicada en Camprodón, Gerona. Hoy por hoy esta gran línea defensiva no tiene razón de ser como tal, y, dado que se construyó en terrenos privados, se pueden plantear problemas a la hora de recuperar o restaurar algunos de estos lugares. En Canfranc se está recuperando el sector 24, (núcleo de resistencia 111), integrado por 13 elementos fortificados que se localizan en el área sur del Paseo de los Melancólicos de Canfranc, y cuyo objetivo era defender la Estación Internacional de Canfranc y el túnel meridional de acceso a España. Los búnkeres más grandes serán habilitados como refugios para peregrinos y montañeros, lo que ya se ha hecho en otros lugares cercanos, como en Villanúa. El 8 de enero de 2011 se dio por inaugurada la "Ruta de los Búnkers" en el término municipal de Biescas (Huesca). Se han instalado 2 paneles informativos explicando la Línea P. La ruta parte de la batería baja del fuerte de Santa Elena y en ella se pueden observar algunos asentamientos pertenecientes al Núcleo de Resistencia 106 (Hoz). fuente Wikipedia.
  8. Elefante artillero Perros auxiliares de sanidas. Palomas mensajeras. En general se usaron caballos, mulas, burros y camellos, para carga transporte para ataque de caballería o incluso como rancho. Perros para transportar medicina y utensilios, para explorar, como detección de explosivos, etc. Además los diferentes regimientos y compañían tenían sus mascotas como hoy sucede y marchaban al combate como uno mas.
  9. Bomba globo Fu-Go https://es.wikipedia.org/wiki/Bomba_globo_Fu-Go Sin duda este fue otro invento mas que les iba a hacer ganar la guerra. Contenían bombas incendiarias y personales. En programas de investigación también se habla que portaban algunas de ellas armas químicas y biológicas. Yo me refiero a los ataques con hidroaviones con base en submarinos, que nadie explica que tipo de submarinos son, que se acercaron a las costas para lanzar sus ataques. Ya esto suponía un altísimo riesgo como para plantearse un ataque al canal de panamá. Yo hace tiempo cuando era chaval, tenía un libro que hablaba de ello. La wikipedia nos habla de esto Después de la incursión Doolittle en abril de 1942, en el que aviones estadounidenses bombardearon el territorio continental japonés, el Cuartel General Imperial ordenó a Noborito que desarrollara una capacidad de bombardeo de represalia contra Estados Unidos.4 En el verano de 1942, Noborito investigó varias propuestas, incluidos bombarderos de largo alcance que podrían realizar incursiones en un solo sentido desde Japón a ciudades de la costa oeste de Estados Unidos, y pequeños hidroaviones cargados de bombas que podrían lanzarse desde submarinos.5 El 9 de septiembre de 1942, este último fue probado en el Lookout Air Raid, en el que se lanzó un hidroavión Yokosuka E14Y desde un submarino frente a la costa de Oregón. El suboficial Nobuo Fujita arrojó dos grandes bombas incendiarias en el Bosque Nacional Siskiyou con la esperanza de iniciar un incendio forestal y regresó sano y salvo al submarino; sin embargo, los equipos de respuesta detectaron el avión y contuvieron los pequeños incendios. El programa fue cancelado por la Armada Imperial El libro hablaba de ataques en plural y no de un único ataque, lo cual desconozco. Un saludo.
  10. Es curioso, sin duda de las mas grandes rarezas de la segunda guerra mundial, y eso que hubo muchas. En principio lo que pretendía Japón era quemar los grandes bosques de Estados Unidos y Canadá para mermar su moral y su economía. El hacer ataques de precisión era una locura, por ello, los ataques serían en zonas poco pobladas, con bombas incendiarias, de noche y con regreso al submarino. Al parecer hubo un ataque con un gran incendio en los bosques de canadá que se atribuye a un hidroavión japonés que muy probablemente formara parte de la dotación de uno de lo submarinos. Una de tantas locuras del japón imperialista. Un saludo.
  11. También se entrenan cetáceos, como delfines, horcas, belugas, incluso leones marinos para uso militar. Desde detección de minas, como ataque a buzos, o como rescate. También para búsqueda submarina de equipo militar. Lo último es dotarles de cámara y usarles para espionaje. Todos los programas son alto secreto pero las principales potencias, todas ellas, usan a estos animales. Un saludo.
  12. Ultimamente se producen muchos errores a la hora de que nos cuenten las bonificaciones por ver los directos del Twich tanto de los directos oficiales de Wargaming como de los colaboradores. Esperas reclamas el regalo y al día siguiente no tienes nada o no te salen drops cuando tocan por fecha, algunas veces los especiales no te cuentan el tiempo etc. En los que tocan esta semana los he tenido que hacer y solicitar dos veces para que me contaran, he tenido que solicitar el regalo, dos veces. Y cada día nos dan menos y lo que dan de menos valor. Un saludo.
  13. 3ZGDT-4GRK2 3ZGDV-CF7RD 3ZGDV-WSSDP
  14. La hambruna de Bengala de 1943 fue una de las varias hambrunas ocurridas en la provincia de Bengala, una división de la India durante la administración de la Corona británica. Se estima que entre 1,5 millones2 (estimación minimalista) y más de 3 millones2 (cifra maximalista) de bengalíes fallecieron de desnutrición y las causas derivadas durante ese periodo. La hambruna de Bengala fue una hambruna de guerra ocasionada en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, en que una combinación de factores como la invasión japonesa de Birmania, la hiperinflación y la desviación de exportaciones de alimentos de Bengala para los soldados del Imperio británico al frente causaron la devastación de la región.34 La Red Internacional sobre Holocausto y Genocidio considera este suceso un genocidio.4 Causas[editar] El Reino Unido había sufrido una derrota desastrosa en la batalla de Singapur en 1942 contra el ejército japonés, que luego procedió a invadir Birmania en el mismo año. Birmania era el mayor exportador mundial de arroz en el período de entreguerras, los británicos habían fomentado la producción de los pequeños agricultores de Birmania, que se tradujo en un virtual monocultivo en el delta del Irawadi y Arakan.5 Para 1940 el 15% del arroz consumido en India provenía de Birmania, mientras que en Bengala la proporción era ligeramente superior, dada la proximidad de la Provincia con Myanmar.6 Parece improbable, sin embargo, que estas importaciones puedan haber ascendido a más del 20% del consumo de Bengala, y esto por sí solo es insuficiente para producir la hambruna, aunque se asegura que hubo menos reservas con que contar. Las autoridades británicas temían una posterior invasión japonesa de la India británica a la región de Bengala (ver Raj Británico), y medidas de emergencia fueron introducidas para garantizar las existencias de alimentos destinados a los soldados británicos y para impedir a los japoneses el acceso a las reservas en caso de invasión. Una política de "tierra quemada" se llevó a cabo en la región de Chittagong, la más cercana de la frontera birmana. En particular, el ejército confiscó muchos barcos (y los vehículos de motor, carros y elefantes), por miedo a que los japoneses avanzaran a una gran velocidad hacia la India, pero eran los barcos que los habitantes utilizaban para la pesca, cuyos productos aportaban al mercado. El ejército no distribuyó raciones para sustituir el pescado.78 Al mismo tiempo, se transportaron grandes cantidades de arroz en la India central para alimentar las tropas británicas e indias, así como Ceilán, que era en gran parte dependiente del arroz birmano durante el período de la preguerra y donde habían reunido muchas tropas temiendo una invasión japonesa en la isla. El 16 de octubre de 1942, toda la costa oriental de Bengala y Orissa fue golpeada por un ciclón. Una enorme área de cultivo de arroz hasta cuarenta millas de la costa se inundó, causando que la cosecha de otoño en esas áreas se perdiera. Esto significó que los campesinos tenían que comer de sus excedentes, y la semilla que se había plantado en el invierno de 1942-1943 había sido consumida por el tiempo de calor que empezó en mayo de 1943.9 Sin embargo, señaló el economista y Premio Nobel Amartya Sen, se considera que no había escasez global de arroz en Bengala en 1943: la disponibilidad era algo mayor que en 1941, cuando no había hambre.10 En parte fue esto lo que condicionó la lenta respuesta oficial al desastre, ya que no había habido pérdidas de cosechas y, por lo tanto, el hambre era inesperado. Una de sus causas fundamentales, sostiene Sen, estaba en los rumores de la escasez que provocaron el acaparamiento y la inflación de los precios causada por la rápida demanda en tiempo de guerra que hizo que las partidas de arroz fueran una excelente inversión (los precios ya se habían duplicado respecto al año anterior). En la interpretación de Sen, mientras que los campesinos propietarios de tierras en donde creció el arroz y los que trabajaban en las industrias de las zonas urbanas y en los muelles vieron cómo sus salarios se elevaban, se condujo a un cambio desastroso en los derechos de intercambio de grupos como los campesinos sin tierra, pescadores, barberos, descascarilladores de arroz y otros grupos que encuentran que el valor real de sus salarios había sido recortado por dos tercios desde 1940. Churchill impidió aliviar la carga a la India, y la aumentó, las industrias indias fueron reconvertidas para ayudar en la manufactura de armas y uniformes a las tropas en África y la frontera con Japón. Esto dejó sin industrias de primera necesidad a las grandes ciudades Indias, lo que, sumado a un aumento en los envíos de granos, provocó el colapso. Al estar las fábricas ocupadas en armamentos, bienes como herramientas agrícolas y ganaderas estaban en escasez. Esto contrajo la producción agrícola y, al no poder entregar la cantidad de grano que los Británicos pedían producir, los terratenientes indios entregaron los almacenes de comida locales. Al haber menos grano disponible en los comercios, el precio se duplicó mientras los sueldos con el esfuerzo de guerra se congelaron por 5 años. Esto causó que, hasta finales de 1944, millones de personas murieran en la peor hambruna de la India del siglo xx.11 En pocas palabras, a pesar de que en Bengala había suficiente arroz y otros granos para alimentarse, las políticas de guerra británicas evitaron el acceso general a los alimentos, y en las zonas donde la gente que sí tuvo acceso no se tenía suficiente dinero para comprar.12 Antecedentes[editar] En 1941 Gran Bretaña mantenía un control total sobre la India, las hambrunas durante el mandato británico eran frecuentes, la más aguda del siglo xix se había llevado la vida de 2.000.000 de indios, la enajenación de los recursos naturales por los británicos impedía cualquier reserva. Los británicos instalados en la India eran grandes terratenientes que producían materias primas de exportación, principalmente algodón y lino para la industria textil de Londres. Así se les prohibía a los hindúes sembrar comida para su subsistencia si no acaparaban las cuotas de algodón entregadas cada año. Los campesinos indios eran siervos. Hasta 1948, estaban anclados a un sistema de castas rigurosas. Con la llegada de Churchill al poder los británicos comenzaron una política de producción forzosa y expolio de cereales en Bengala para exportar a Gran Bretaña, lo que dejó sin medios para subsistir a millones de indios y desplazó a miles de personas, atestando las ciudades de Bengala. El precio se duplicó mientras los sueldos se congelaron por 5 años; esto causó que en 1943 murieran 2 millones de personas en la peor hambruna de la india del siglo xx. Mientras la situación se deterioró, el Virrey británico pedía a Londres granos para la gente hambrienta. La respuesta de Churchill fue negativa, ordenando acelerar la política de destrucción de cosechas en Bengala, incrementando el expolio forzoso de cereales en el resto de la India para exportar a Gran Bretaña, descendiendo las cuotas que se le asignaban a la población local y que el grano solo se destinara al frente de la guerra.13 Responsabilidades[editar] Bayly y Harper afirman que, en contraste con la incompetencia de la administración pública, los mandos militares y los militares británicos en general, llevaron a cabo lo mejor que pudieron para combatir el hambre,14 el suministro de alimentos a los que sufrían y el alivio de la organización. Durante el curso de la hambruna, el gobierno repartió alrededor de 110.000.000 de comidas gratis15 que resultaron insuficientes para hacer frente al desastre. Al día de hoy, es más claro el papel que desempeñó Winston Churchill, el Primer Ministro británico de la época. En respuesta a una petición urgente del Secretario de Estado para la India, Leo Amery y Wavell para que liberara reservas de alimentos para la India, Churchill le envió un telegrama preguntando que, si la comida era tan escasa, por qué Gandhi no había muerto todavía. Durante el mandato de Churchill, Gran Bretaña, dueña de Irak desde el Tratado de Sèvres tras la I Guerra Mundial, ante una rebelión de iraquíes y kurdos había utilizado la privación de alimentos como represalia, junto al gaseado de población civil, que supuso el asesinato de más de 10.000 personas. El mismo Churchill declaró en el Parlamento Británico: “No entiendo este rechazo sobre el uso de las armas químicas. Definitivamente hemos adoptado la posición en la Conferencia de Paz de argumentar a favor de las armas de gas como una forma permanente de la guerra (…) Estoy totalmente a favor del uso de gas venenoso contra tribus incivilizadas [sic].” Por sus declaraciones y actitudes frente a los Indios, muchos historiadores han considerado la complicidad directa de Churchill en la hambruna. Inicialmente, durante la hambruna estuvo más preocupado por los civiles de Grecia (que también estaban sufriendo de hambre) que de los bengalíes. Al final, Churchill pidió la ayuda de EE. UU., en carta a Roosevelt, pero la respuesta estadounidense fue negativa. El Gobierno de Bengala no pudo impedir las exportaciones de arroz, y poco hizo para importar los excedentes de otras partes de la India, o para comprar reservas de los especuladores para redistribuir entre los hambrientos. En general, como demuestra Sen, "Las autoridades no entienden que la hambruna no fue causada por una escasez global de alimentos, y que la distribución de los alimentos no es solo una cuestión de capacidad ferroviaria, sino de proporcionar alivio de la hambruna libre en una escala masiva " El Raj, de hecho, hizo bastante bien en su estimación de la disponibilidad general de alimentos, pero desastrosamente mal en su teoría de hambrunas ".16 La hambruna terminó cuando el gobierno de Londres acordó importar 1.000.000 de toneladas de grano a Bengala, reduciendo los precios.17 Hambrunas en el subcontinente Indio y democracia[editar] La hambruna de Bengala se puede colocar en el contexto de otras anteriores ocurridas en el Imperio mogol y en la India británica. La hambruna del Deccan de 1630-32 mató a 2 millones de indios. Durante el dominio británico en la India hubo unas 25 grandes hambrunas, que se propagaron a través de estados como el de Tamil Nadu del sur de la India, el de Bihar en el norte y en el de Bengala en el este; en total, entre 10 y 20 millones de indios fueron víctimas de las hambrunas solo en la segunda mitad del siglo xix.18 Aunque la desnutrición y el hambre siguen estando muy extendidas en la India, no ha habido hambrunas importantes desde el fin del dominio británico en 1947 y el establecimiento de un gobierno democrático. Diferente es el caso de Bangladés, que, a diferencia de la India, ha pasado un largo período de su existencia bajo gobiernos militares, donde ha habido hambrunas recurrentes, algunas muy recientes [2][3]. Fuente. Wikipedia